Esta frase me la dijeron ayer y vale, tal vez estoy siendo un poco exagerada pero el concierto de anoche tuvo todos los componentes necesaros para realmente, pasar a la historia. O al menos a la historia del grupo.

Ayer, en la Sala Sol de Madrid, tocaron Sidecars, de los que ya os he hablado en más de una ocasión. Los vi por primera vez en la mítica Gruta 77 de Carabanchel cuando sólo había escuchado las cuatro canciones que tenían en su Myspace. Pero claro, con unos padrinos como los que tienen y, además y sobre todo, un disco muy bueno, están llegando muy muy alto. Tan alto que anoche nos anunciaron que se habían llevado el de Mejor Disco de Rock Alternativo en los Premios de la Música. Y con méritos propios... Y quisieron celebrarlo por todo lo alto y agradecernos a los seguidores el éxito que están teniendo con dos sorpresas. Dos grandes sorpresas musicales de lujo.

Por un lado apareció Quique González para cantar "Hotel los Ángeles" y después de un rato, la segunda sorpresa que ya nos podíamos imaginar (más que nada porque los habíamos visto por la sala) fue la aparición de Leiva para cantar "Mundo Frágil" y alguna otra más. Complicidad, cariño... pero también pelea guitarrera entre hermanos nos hizo saltar de emoción a muchos.

Y por eso creo que será uno de esos que hacen historia: celebran su premio de la Música, sale Quique González, sale Leiva, llenan El Sol...
Y yo estuve allí (esta frase últimamente la estoy repitiendo mucho...)

Os dejo una de las fotos de la noche