Esta semana Barcelona, la ciudad en la que me gustaría seguir viviendo, se ha convertido en la capital mundial del mercado inmobiliario. Del sucio, rastrero e injusto mundo de la compraventa de viviendas. Y aunque es un tema de vital importancia para muchas personas y que lleva de cabeza a la gran mayoría de la población española, no voy a hablar de lo duro que es comprar un piso, si no de lo duro que es independizarse.
Hace poco, entre copas y con amigos, tuve una conversación que, aunque por un lado no me hizo sentir tan rara, me dio que pensar muchísimo. La gran mayoría de las personas que allí estábamos, coincidíamos en que ya era hora de salir del nido y no lo hacíamos no por falta de ganas. Y no es que estemos mal en casa, porque nadie nos cuidará mejor que papá y mamá. Pero el ser humano necesita ciclos y el ciclo en el que estamos empieza a durar demasiado. Y ojo, que la mayoría no llegamos a los 26 años (pobres aquellos que con 30 estén en casa) y en realidad acabamos de acabar “el cole”. Pero si nos ponemos a pensar, al paso que vamos jamás lo lograremos. Tenemos sueldos miserables aquellos que con suerte hemos conseguido un trabajo y más suerte aún los que tienen coche gracias a sus padres. No podemos ni pensar en irnos a vivir solos, ni acompañados, ni con un equipo de fútbol entero. No podemos pensar que dentro de unos meses “todo irá mejor” porque sabemos, que vayamos donde vayamos seremos los eternos “prácticas” y no nos merecemos cobrar ni sueldos mínimos interprofesionales.
Ahora, intentad recordad ese anuncio de la tele de una caja de ahorros que dice… “los jóvenes nos lo curramos, estudiamos, trabajamos y que nos compramos piso aunque parezca imposible. Que nos divertimos y que si queremos algo lo conseguimos…”
  1. Trabajamos los que podemos
  2. No nos compramos piso y no parece imposible, lo es.
  3. Si nos divertimos, haciendo botellón aunque esté prohibido.
  4. Y si queremos algo, tal vez lo consigamos cuando ya dejemos de quererlo.

Nuestro padres a nuestra edad, ya habían cambiado de ciclo... Así que lo único que nos queda es...

PACIENCIA

Comments (9)

On 9:27 p. m. , alex dijo...

Ánimo, a ver si podeis cambiar la sociedad, es algo que todos hemos intentado, y al acomodarnos ya pasamos.
Pero la verdad es que lo teneis mu difícil. Ya te he comentado varias veces cual sería mi plan de acción en tu caso, y por extensión el de tus amigos borrachines "Hace poco, entre copas y con amigos, tuve una conversación que...".

Suerte!

 
On 11:57 p. m. , Anónimo dijo...

esa es la palabra clave...paciencia! pero tambien lo son: trabajo (y no el remunerado, sino el currarselo), trapicheos (mas de los q pensamos viven gracias a los trapis), prestamos (bancarios o familiares), vivir de los papas (quien pueda y aunque los odiemos)...o como yo, largarse a otro pais/ciudad (eso si, temporalmente).

Besitos!

 
On 12:04 p. m. , Norma dijo...

Está claro que hay mil soluciones, pero ojalá no tuvieramos que vivir de prestado ni rogar limosnas por algo a lo que tenemos derecho, que es una vivienda digna.

Pero bueno supongo que tarde o temprano podremos hacerlo.

 
On 8:02 p. m. , Anónimo dijo...

Tienes toda la razón Norma. Además lo que dejámos de ser los eternos "prácticas" hace tiempo estámos en la misma situción (y tampoco supero los 26 años). Esta sociedad es un desastre, pero por mucho que querámos cambiarla, creo que nosotros no lo podremos ver, aumque si forjar las bases para que los que venga tengan más suerte...

Viva la República!!!! jajajajjaa

 
On 8:03 p. m. , Anónimo dijo...

Madre mías como se nota que llevo 11 horas seguidas currando, que desastre ortográfico mi texto buf...

 
On 8:04 p. m. , Norma dijo...

Alaaaaaaaaaaa

Deja las drogas Crispín, no te sientan nada bien...
jejeje

 
On 9:42 a. m. , Norma dijo...

¿Alguien me puede decir qué es esto?

 
On 1:22 p. m. , Lokita dijo...

Correo comercial, correo comercial...

 
On 1:28 p. m. , Norma dijo...

No me lo puedo creer que el "correo comercial" haya llegado a los post de los blogs.. si es que no se donde vamos a ir a parar señor!!